Al menos cinco personas han muerto en Damasco en los ataques con morteros que se produjeron en varias zonas de la capital siria.

Según la agencia oficial SANA, los nuevos ataques, perpetrados por los rebeldes, han sido dirigidos contra los barrios residenciales de Amara, Qassa y al-Abbasyeen, en el sur de Damasco. Cinco personas murieron y 30 resultaron heridas cuando dos proyectiles cayeron en un mercado en el área de Bab al-Salam en Qassa, un barrio cristiano, informa la agencia Xinhua. 

Otro proyectil cayó en una iglesia armenia en la misma zona, dañando los edificios cercanos. Otros obuses causaron daños materiales en los distritos del sur de Damasco. 

Este nuevo ataque ocurrió en medio de fuertes enfrentamientos entre las tropas gubernamentales y los rebeldes en las zonas rurales del sur de Damasco. 

Más información, en breve.